Grupos y cuentas de apoyo al MAS y a la oposición son los motores y cajas de resonancia de la desinformación política en el país. En los últimos meses varias desaparecieron, pero quedan centenares.
Un análisis a la base de datos de Bolivia Verifica revela que la mayoría de los contenidos desinformantes (44%) apuntan contra la oposición, mientras que un 14% afecta al oficialismo.