Desde la ISS
La Starliner de Boeing regresó a la Tierra
La cápsula Starliner de Boeing retornó ayer a la Tierra en la etapa final de una prueba clave con el objetivo de demostrar que es capaz de llevar a los astronautas de la NASA a la Estación Espacial Internacional (ISS).
La nave espacial se desacopló de forma autónoma a las 14:36 hora del este de Estados Unidos (18:36 GMT) y aterrizó en el desierto del estado estadounidense de Nuevo México, en la base de White Sands, poco más de cuatro horas después, a las 22:49 GMT.
Así se terminó una misión de seis días, crucial para restaurar la reputación de Boeing tras un primer fracaso en 2019.
En diciembre de 2019 fracasó un primer intento de alcanzar la EEI al desviarse del rumbo previsto por problemas técnicos y no alcanzar la órbita buscada.
La misión Orbital Test Flight 2 (OFT-2), con un vuelo de prueba no tripulado, es el último test que debe superar Starliner antes de transportar seres humanos en otro vuelo que podría tener lugar a finales de este año.
La cápsula se acopló a la ISS el viernes, un día después de despegar del Centro Espacial Kennedy, en Florida (sureste de Estados Unidos).
La NASA busca certificar a Starliner como un segundo servicio de “taxi” para astronautas hacia la ISS, una función que ya cumple la empresa SpaceX, de Elon Musk, desde el éxito en 2020 de su misión de prueba con su cápsula Dragon.
En caso de recibir estos mensajes dudosos, se sugiere no hacer click en ningún enlace sin verificar su origen.
Para más información puede contactarnos