AFP / Hanoi
Ayer, las banderas ondeaban a media asta en los edificios públicos de Vietnam, un país comunista donde el Gobierno decretó duelo nacional por la muerte de Fidel Castro, una decisión que ha dividido la opinión pública.
Tras la muerte del revolucionario cubano el 25 de noviembre, las autoridades vietnamitas se han deshecho en elogios hacia una figura calificada por el Gobierno como "un hermano comunista” y un "compañero”.
En la embajada de Cuba en Hanói no han faltado ni las flores y ni los dolientes. Ayer, en los edificios oficiales ondeaban las banderas a media asta con crespones negros y las autoridades lanzaron llamados a que se suspendan las actividades de entretenimiento.
Pero este día de duelo nacional, antes sólo reservado a políticos vietnamitas o a héroes de guerra, no ha sido aceptado por consenso.
Si bien en Vietnam, los ciudadanos no critican abiertamente al Gobierno en público, en las redes sociales las críticas a esta decisión abundaban.
En cambio, en los medios oficiales abundaban los comentarios favorables que alababan el apoyo que Castro dio al país.
De hecho, el presidente vietnamita, Tran Dai Quang, fue el último Jefe de Estado en visitar a Castro, el pasado 16 de noviembre, 10 días antes de su muerte.
Cuba contribuyó incluso a la reconstrucción del país tras la guerra y financió proyectos de infraestructura.